Una de mis pasiones ultimamente, y parte de este estudio sociológico que estoy haciendo, es tratar de verle las caras a esas personas consumidoras de travestis de los lagos de palermo. Y vi de todo, y en general es todo muy estereotipado, tanto que da gracia. Es como si todos fueran personajes salidos de películas de Todd Solondz.
Hoy, mientras estaba en la callecita que es la última parte de mi recorrido, pero que a la vez es la pasarela de travestis por donde todos los autos van lento y miran, pasaba por al lado de una camioneta de escolares, y así de reojo veo que había una mina adentro, así que decidí mirar, porque me imaginé una situación en la que dos personas medio hippies, mujeres, iban viendo toda la situación de travestis y riéndose un poco de todo. Cuando miro bien, no eran dos mujeres, sino un tipo con un travesti, que apenas pudo, dobló hacia una zona oscura para hacer esas cosas horribles que deben hacer con travestis. Solo que arriba de una camioneta de escolares. Miedo.
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