Hoy después de 1 mes volvimos al taller.
Necesitábamos todas nuestras cosas de trabajo y no estábamos seguros de cómo hacer para recuperarlas, pero encontramos el permiso para salir que mas o menos se ajustaba.
De todo lo que sentía con respecto a no estar yendo hace tanto tiempo, una de las cosas que más lástima me daban eran las plantas, que las daba totalmente por muertas después de 1 mes de no ser regadas (además de la parte de no poder ir al lugar que querés, en el que pasás la mayoría del tiempo y en el que hacés trabajos con los que te dan plata).
Para nuestra sorpresa las plantas estaban vivas, algunas iguales a cómo las dejamos, otras incluso mas crecidas, esperándonos como Gamuza a que volvamos a casa después de estar medio día afuera.
Buscamos y guardamos metódicamente todo lo que necesitábamos (un montón de cosas), les dejamos agua de reserva a las plantas de adentro y dejamos algunas afuera para que las regara la lluvia cuando se les acabara, esperando que cuando volvamos esten igual o mejor que hoy.
Saludamos al taller, le agradecimos y nos fuimos.
Ojalá volvamos a habitarlo pronto.
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