7.8.11

bieber, el perro gigante y las bicicletas

Como todos los primeros domingos de cada mes, hoy era la masa crítica. Hacía varios meses que no iba, sobre todo por este temita del frío. Hoy estaba relativamente bien, pero no tenia idea la concurrencia que podía haber. Ya llegando al obelisco vemos que hay MUCHA gente. Raro. Pero cuando nos acercamos más vemos que no tenían bicicletas, que eran adolescentes. Algo relacionado con un viaje de egresados? parecía, estaban todos de violeta. Y con un comportamiento tan raro como que cuando se ponía el semáforo en rojo, cruzaban todos corriendo de un lado para el otro. Hormonas. Al llegar ahí todos te gritaban desaforados. Desaforadas mas bien, eran casi todas chicas. Ya ahí, viendo con un mínimo de detalle, tenían todas fotos y remeras de Justin Bieber, todo se explicó. Ciclistas y fanas de Justin unidos en el obelisco, casi como esa vez de zombies y ciclistas. Y se explicó lo otro, cruzaban a ver si los pisaban a todos de una vez. Auto-selección natural, me pareció muy sabio.
Y apenas arrancamos hubo una situación muy fellinezca. Era dificil avanzar porque parecía que estaban desarmando un escenario o algo así, que no era raro en esa zona. Pero no, estaban desarmando el perro ese gigante, creo que de pepsi, que estuvo todo este último tiempo ahí en lo alto, cerca del obelisco. Y era bastante surrealista estar ahí en bici con un cacho de cabeza gigante al lado, un ojo gigante de perro, mirándote, y siendo transportado por gente en un camión gigante.
El resto de la bicicleteada transcurrió no tan surrealistamente, con un lindo sol de hora mágica para terminar.

1 comentario:

Bell dijo...

Amo estos relatos.